Cita en el huerto urbano de Fontsana Son Armadams
Descubre los beneficios que la horticultura aporta a las personas que viven en las residencias de mayores
Lo que en su día fue un proyecto que buscaba que los usuarios de la residencia de personas mayores del centro de Palma Fontsana Son Armadams reconectasen con la naturaleza, se ha convertido en una experiencia absolutamente enriquecedora.
Nos referimos al huerto urbano de la residencia de ancianos, que los usuarios ayudaron a crear el pasado mes de marzo, y que acaba de generar su primera cosecha de acelgas.
Según Ana Zamora, coordinadora del centro de día Fontsana Son Armadams, “el huerto urbano ha sido una de las actividades que más ha gustado a los usuarios de nuestro centro de día. Además, ha sido la que más implicación ha suscitado, ya que se han tomado su cuidado como una gran responsabilidad”.
Beneficios de la horticultura en las personas mayores:
La horticultura ha llegado al centro de día de personas mayores de Palma Fontsana Son Armadams para quedarse. Si su instalación creó interés en los usuarios, su mantenimiento ha sido una auténtica fuente de inspiración y de motivación diaria para todos ellos.
Para Ana Zamora, “el cuidado del huerto urbano de Fontsana Son Armadams ha propiciado una participación sin precedentes. El supervisar cada día sus necesidades, y el regarlo cuando ha sido necesario, se ha convertido en una de sus principales tareas del día”.
Otro aspecto muy positivo, además de ese sentimiento de responsabilidad, añade, “ha sido la socialización que ha causado entre los usuarios. Teniendo como hilo conductor de sus conversaciones al nuevo huerto urbano, la relación entre ellos se ha hecho mucho más estrecha, y eso ha reforzado el sentimiento de pertenencia al grupo. Algo que es tremendamente positivo para las personas mayores, porque refuerza su seguridad y mejora su ánimo”.
Además, al estar ubicado el huerto en el exterior del centro de día, su cuidado ha obligado a los usuarios a salir de las instalaciones, y a disfrutar del sol y el aire libre. Una exposición muy positiva, que sin duda beneficia a su estado físico y mental.
Del huerto al plato:
Pero la guinda de esta actividad ha sido el placer de ver recompensados los esfuerzos. El huerto urbano de Fonstana Son Armadams ha dado ya sus primeros frutos, y los usuarios han gozado recogiendo la primera cosecha de acelgas.
“Había muchas ganas de cortar los brotes y cada día nos recordaban lo grande que estaban. El día que decidimos recolectarlas fue una gran fiesta, tanto a la hora de cogerlas como, sobre todo, al comer la ensalada que hicimos con nuestras primeras acelgas”, comenta Ana.
Después del éxito de esta primera experiencia, y comprobadas las muchas ventajas que ofrece la horticultura a las personas mayores, el centro de día Fontsana Son Armadams contempla mantener la actividad del huerto urbano durante todo el año.
En cuanto cosechen los otros cultivos que hay plantados ahora, elegirán las próximas plantas que quieren sembrar, respetando la temporada.